emBlue, empresa argentina líder en email marketing, decidió analizar el término Marketing de Permiso. En el marketing por correo electrónico, este término hace referencia al deber de solicitar la conformidad de los consumidores antes de enviar publicidad o cualquier información de una empresa. Por el contrario, cuando los usuarios reciben correos no solicitados, esto se considera una acción de marketing de interrupción o spam.
Dentro de este contexto, la compañía analiza cuales son las ventajas de aplicar esta técnica:
- Es personal: los mensajes están directamente relacionados con cada persona.
- Es relevante: el destinatario demostró interés por la empresa o los contenidos de sus comunicaciones, generando alguna acción posterior.
- Hay menos posibilidades de que los destinatarios soliciten darse de baja de la lista o planteen una queja.
- Permite entablar un vínculo más cercano y/o duradero con clientes actuales y potenciales.
- Repercute positivamente en el desempeño de acciones futuras.
Planteados estos beneficios, la importancia de este recurso radica en que el marketing de permiso es importante porque evita que la IP (número que identifica el origen desde donde se envían los mails) quede incluida en alguna lista negra, que consiste en una base de contactos de los filtros anti-spam en donde figuran todas aquellas direcciones de correo electrónico, IPs o dominios cuyas comunicaciones se rechazan por no considerarlas legítimas o de confianza.
Los usuarios también pueden colaborar en esta clasificación, ya que cada vez que se dan de baja de una lista o plantean una queja contribuyen a nutrir esas bases. Esto podría derivar como posible efecto secundario que una dirección de correo legítima sea considerada como spam. Incluso algunos proveedores (como AOL, MSN, Hotmail, Yahoo, etc.) no requieren la actividad de los usuarios para reportar. Varios de ellos pueden bloquear automáticamente los correos si no superan las pruebas realizadas por los filtros que poseen. Cabe destacar que los proveedores y los filtros frecuentemente comparten contenidos entre sí. Por ende, se sugiere que el destinatario final manifieste su deseo de suscribirse a las comunicaciones. Esto se conoce en inglés como opt-in.
El opt-in está considerado como una buena práctica para los envíos por correo electrónico y se recomienda para eliminar direcciones de correo falsas o mal escritas.
¿Cómo se logra implementar una suscripción?
A continuación se exponen algunas recomendaciones:
1) Incentivar la suscripción a los formularios de los usuarios que son de nuestro interés. Como sugerencia, prevalece guardar copias de todos los formularios “opt-in” en el caso de recibir una denuncia por envío de spam. Es importante no comprar Bases de Contactos.
2) Luego que el contacto haya ingresado sus datos, es necesario enviarle un correo con el pedido de reconfirmación, de esa manera se garantiza con un segundo control que efectivamente se confirma la suscripción. Dentro del pedido se debe incluir un enlace a una “landing page” que informe sobre la activación definitiva de la suscripción y que contenga la leyenda con un comentario similar al siguiente: “Si usted recibe este email por error simplemente bórrelo. No estará suscripto a menos que haga clic en el enlace".
3) Una vez que el usuario haya confirmado su interés en recibir las campañas, se le envía un correo para darle la bienvenida y comenzar el proceso de fidelización.
“Es importante tener presente todos los consejos y recomendaciones que están a nuestro alcance antes de emprender cualquier campaña de marketing por correo electrónico. Siempre es mejor empezar cualquier vínculo con nuestra audiencia de la mejor forma, y recordar que es más fácil mantener una buena relación que recuperar la confianza de alguien que se ha sentido molesto con alguna de nuestras prácticas”, concluye Victoria Cravino, Responsable de Marketing de emBlue.
Profesionales Consultados: Victoria Cravino, responsable de Marketing
Web: www.embluemail.com
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